EL CORDÓN DE PLATA

21 de Agosto 2017
Sueño lúcido
Puedo ver mi cuerpo en la cama. Diviso desde arriba una luz potente que sale de mi ombligo en mi cuerpo físico.
Me veo que “yo” en mi cuerpo físico me toco el ombligo, como si algo percibiera.
En el ombligo desde arriba puedo ver un como un foco de luz.
Siento aquí arriba una energía que me une a ese cuerpo, al mirar puedo ver un hilo de luz que me une y termina en el ombligo de ese cuerpo físico.
Continuo observando esta cuerda o potente hilo y puedo distinguir una luz plateada que se extiende, desde mi ser que esta arriba hasta ese ombligo en mi cuerpo físico que se haya en la cama.
Acá desde arriba puedo volar, moverme por el aire libremente, es una sensación hermosa y extraña porque también puedo verme en la cama, pero es difícil reconocer que ese cuerpo es mío.
Es raro verme acá y allá.
Puedo sentirme liviana, volar, es muy raro el hecho de pensarme en ese cuerpo, que parece limitar estas potencialidades que poseemos.
Sentí ganas de viajar y en ese momento pude verme en el cielo.
Disfrutar de esa sensación de volar y estar en un lugar sólo con pensarlo.
Aunque dentro mío sabía que tenía que regresar a mi cuerpo.
Pude disfrutar de manera consciente, sí digo consciente porque lo era. Sabía que estaba durmiendo, podía verme en mi cama y a la vez me encontraba mirándome desde arriba y
podía recorrer diferentes sitios.
Estoy acá arriba mirando mi cuerpo ahora y siento a la vez que mi cuerpo en mi cama tiembla, se mueve, y ahora estoy entreabriendo mis ojos.
He tenido experiencias oníricas de volar, pero esta he estado consciente  todo el tiempo y poderme ver en ambos lados fue impactante.
Gracias, Gracias, Gracias a Dios por permitirme esta hermosa experiencia.



No hay comentarios:

Publicar un comentario

Cursores
Big Bird Sesame Street