Sueño lúcido
8 de Julio 2015
Estaba en un lugar blanco, muy
blanco. A mi lado aparecía una mujer joven, morena, con rasgos indígenas, vestida
de blanco, y con un pañuelo blanco atado en su cabeza. Ella me daba una foto.
En esa foto se veían chorros de agua transparente que caían desde lo alto, era
como una cortina de agua. A través del agua se podía ver la montaña y la vegetación.
Esta agua iba hacia la Tierra y formaba un río de gran caudal de agua.
Esta mujer me decía:
“Así eres tú. Como esta agua
transparente y vital, en ella se encuentra toda la información para el cambio.
Para eso has venido acá, para dar a través tuyo esa información. La transmites
a través de tu ser, con el sólo estar acá transmites esa energía que portas.
Como el agua que al beberla limpia y da energía, pero que también estando al
lado de una vertiente uno escucha su sonido y la ve correr y eso hace a la
persona que se encuentra allí se sienta mejor al conectarse con la naturaleza.
Entrega esa energía que portas a la
luz para que brille aún más, pero también a la oscuridad, a la negrura más
intensa para que se ilumine. Ya que ese es el trabajo más arduo.
Ese es el trabajo ahora iluminar lo
más oscuro, lo más denso, al entregarle esa energía de luz se irá transformando
en más sutil. Este es el gran momento de iluminar la espesa negrura que aflorará
más y más a medida que esta realidad avance.
Es tiempo del desenlace y allí es
cuando aflora el caos para que pueda nacer lo nuevo.
Muchos como tú están acá con esa
misión, diseminados por todo este bendito planeta.
Están en los momentos finales de
esta realidad.”
Gracias, Gracias, Gracias a este
Ser, a la Fuente por permitirme conocer esta información.
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